No permitas

Érase una vez una mariposa, todos la apreciaban por su noble corazón y gran hermosura, había ganado muchos concursos de belleza, pero un día una cucaracha envidiosa le dijo: Todos te admiran solo por lástima, ya que yo soy la más bella, y para demostrártelo, te desafío a un concurso de belleza.

Te venceré con el jurado que tú elijas, dijo la mariposa. Llegó el día de la competencia, la mariposa estaba convencida de que ganaría, pero, no contaba con que el jurado estaba conformado por cucarachas, lombrices, chinches y piojos.

Todos los jueces votaron por la cucaracha. Se dice que desde entonces la mariposa nunca más volvió a ser la misma, a pesar de ser la más bella del lugar. Mientras tanto, la cucaracha disfrutaba viendo cómo la mariposa se iba marchitando.

Moraleja: No permitas que la opinión ajena defina tu valor.